La Santa Faz de Nuestro Señor Jesucristo

¡El Ícono pintado no por manos de hombres!

El apostolado de la santa faz busca acercar a cada persona al corazón doliente y herido de Nuestro Señor Jesucristo para que pueda, por medio de actos de adoración y reparación, aplacar dicho dolor.

A través de estas páginas iremos recorriendo la historia del velo de La Santa Faz tanto en la tradición occidental como en la tradición oriental a lo largo de la historia.

La Veneración dentro de la Santa Iglesia Ortodoxa

El ícono de la Santa Faz de Nuestro Señor Jesucristo siempre gozó de elevado respeto y veneración dentro del pueblo Ortodoxo desde los inicios del cristianismo.

La imagen no hecha por manos de Nuestro Señor Jesucristo de Edesa a Constantinopla 944.

Mientras el Señor predicaba en Palestina, su fama alcanzó al rey Abgar V de Edesa, que padecía lepra. Abgar envió a un mensajero llamado Ananías para preguntarle si el Señor podía curar su enfermedad.

El rey también encargó a Ananías, si no podía traer de vuelta a Jesús mismo, que le devolviera una semejanza. Cuando Ananías encontró a Jesús, el Señor le dijo que no podía venir a Edesa porque el tiempo de Su pasión estaba cerca, pero tomó un paño y se lavó el rostro, dejando milagrosamente una imagen perfecta de su rostro en la tela. Ananías devolvió la Santa imagen al rey, quien la besó con reverencia, inmediatamente su lepra sanó, salvo una pequeña lesión que le quedó en la frente.

Más tarde el apóstol Tadeo llego a Edesa, predicando el evangelio, y Abgar y su familia se bautizaron, momento en el que desapareció la lepra que le quedaba. El Rey hizo montar la imagen sagrada en madera y exhibirla sobre la puerta de la ciudad para que todos la reverenciaran.

Pero el nieto de Abgar volvió a la idolatría, y el obispo de Edesa escondió la imagen en la muralla de la ciudad para evitar que fuera profanada, muchos años después, cuando el rey persa Cosroes sitió Edesa, se le dijo al obispo Eulabio en una visión que encontrará la cámara sellada, cuya ubicación había sido olvidada.

El ícono sagrado fue encontrado completamente incorrupto, y por su poder el ejército persa fue expulsado. En el año 944 la imagen fue llevada a Constantinopla y consagrada en la iglesia de la Theotokos llamada Pharos.

San Judas Tadeo y el Rostro de Jesús

Una pequeña ciudad en lo que hoy es Turquía conservó dos reliquias importantes de Jesús. Una carta en la que Jesús aparentemente le habría respondido al rey Agbar. Y un lienzo en el que está estampado el rostro de Jesús, que se llama Mandylion. En ambos hechos participó San Judas Tadeo como enviado de Jesús.

Su intercesión es sin duda muy poderosa con Dios, y su fama para la adquisición de favores a los fieles en las necesidades desesperadas es casi global. Por una tradición piadosa San Judas está involucrado en una historia extraordinaria de una carta que se dice que ha sido escrita por, o dictada por, Nuestro Señor Jesucristo. En este artículo expondremos sobre los dos temas: la supuesta carta de Jesús y especialmente sobre el lienzo Mandylion.

La carta de Abgar y la respuesta de Jesús

Eusebio cita la carta así como la respuesta supuesta de Jesús.

“Agbar, gobernante de la ciudad de Edesa, a Jesús el Salvador, el buen médico, que ha aparecido en Jerusalén, Saludos. He oído hablar de usted y acerca de las curaciones que realiza sin medicamentos o hierbas.

Lo que he oído es que Ud. hace que los ciegos vean y los cojos anden, limpia a los leprosos, expulsa espíritus inmundos y demonios, cura a los que han sufrido de enfermedades crónicas y dolorosas, y resucita a los muertos.

“¡Bendito el que nunca me ha visto y sin embargo cree en mí.

Hace mucho tiempo que estaba escrito que los que me verán, no creerán en mí y aquellos que no me han visto creerán en mí y serán salvos. En cuanto a su petición de que lo visite, es mejor para mí quedarme aquí y terminar el trabajo que fui enviado a hacer. Después de que haya terminado, entonces voy a ir con el que me envió.

Varias fuentes dicen que cuando los discípulos fueron a todo el mundo, Judas fue primero a Edesa para cumplir con la promesa de Jesús a Agbar. Eusebio dice que leyó estas cartas en una traducción griega del arameo original y no cuestionó su autenticidad. En estos días son descartadas como falsas, aunque algunas personas creen que estos fueron mensajes verbales fueron escritos después.

La tela fue venerada en Edesa y luego, después del año 945, en Constantinopla, en la iglesia de Santa Sofía (Iglesia de la Santa Sabiduría). Durante la Cuarta Cruzada en 1204 la tela desapareció. Hay muchas versiones sobre lo que sucedió luego. Podría ser que la tela estuviera en la iglesia de San Bartolomeo degli Armeni en Génova, o en el Vaticano o en un Museo británico. También se ha relacionado con el Santo Sudario de Oviedo y con la Sábana Santa de Turín.

El Santro Rostro dentro de la Iglesia Romana

Dentro de la tradición occidental, propagada por la Iglesia Católica Romana, es una devoción que se escuchó por primera vez a través de una monja carmelita llamada Hermana María de San Pedro en Francia, 1844, quien declaró que Nuestro Señor le reveló esta devoción en el Monte Carmelo. La hermana María de San Pedro declaró que Nuestro Señor quería que esta devoción se extendiera por todo el mundo con el objetivo de reparar los pecados que ofenden a Dios.

Cuando un hombre llamado Leo Dupont tomó esta devoción y comenzó a practicarla en privado en su casa, rapidamente comenzaron a ocurrir milagros de primera clase, que duraron más de 30 años. Esto se convirtió inmediatamente en el tema de Francia y atrajo la atención de la Iglesia Católica Romana, que investigó y reconoció públicamente que los milagros eran auténticos. Estos milagros atestiguan la autenticidad de las revelaciones de Nuestro Señor a la Hermana María de San Pedro.

En 1885, para llamar la atención sobre la importancia de esta devoción, el Papa León XIII estableció esta devoción especial como una Archicofradía; y contrario a la costumbre, lo estableció de inmediato para TODO EL MUNDO. Tenga en cuenta que se han concedido numerosas indulgencias de varios Papas, entre ellos el Papa Pío IX y el Papa León XIII, a los dedicados a la devoción al Santo Rostro de Jesús. Aquí hay copias de los escritos papales reales del Papa León XIII en 1885:

Tenga en cuenta que Santa Teresa de Lisieux también estaba muy dedicada a esta devoción, que incitó a tomar el nombre de "Teresa del Niño Jesús y de la Santa Faz". Esta devoción fue practicada universalmente antes de la Primera Guerra Mundial, pero desafortunadamente, se ha vuelto poco conocida.

Se adjuntan muchas promesas maravillosas a esta devoción, que se puede ver en nuestra página. Para comprender cómo surgió esta devoción y los milagros asociados con ella, vea también nuestra página de Cronología.

Toda la información restante sobre la Devoción de la Sagrada Faz, incluida la información sobre cómo obtener una medalla de la Santa Faz y un rosario para ayudar con esta devoción, está disponible a través de estas páginas.